De hecho, es un hecho probado. Nadie se negaría a semejante sesión de entrenamiento en el boxeo, mira como ella estaba chupando furiosamente su gran polla, y además parece que lo está disfrutando. En general creo que un polvo tal será una norma para ellos ahora, porque es poco probable que se detenga en las emociones recibidas, van a querer más y más, y allí más y más, sólo tenemos que ver.
No, ¡mira a esta chica caprichosa! El abuelo le trae esto y aquello, ¡y ella quiere pimienta! El viejo no es un androide. No puede resistirse. Ni siquiera la polla corta le molesta, la perra se la traga entera. Aparentemente no es el primero que usa su boca como un coño.